Dentro de la limpieza de una casa particular, uno de los espacios que más tiempo requiere para su limpieza es la cocina, además es en el que más tiempo pasamos, especialmente si el comedor está dentro, resultando ser una de las estancias que más se ensucian en proporción con otras zonas de la casa. Por lo tanto, debemos de tenerla impecable si queremos poder cocinar, comer y disfrutar de nuestra familia en un entorno bien desinfectado.
Como ocurre con otras tareas domésticas, algunos elementos se deben limpiar de forma rutinaria, mientras que otros se deben hacer cada 7, 15 o 30 días. Pero ¿sabes realmente todos los elementos que deben limpiarse en una cocina?
En Limpiezas La Aurora somos expertos en realizar limpieza profesionales de cocinas particulares y queremos compartir contigo nuestra guía definitiva para que siempre luzcan en perfectas condiciones.
Aunque hoy en día la tecnología nos facilita también la limpieza doméstica, como es el caso de algunos modelos de horno, es una de las tareas que debemos realizar periódicamente. Hay hornos pirolíticos o que se limpian por aqualisis, pero siempre debes retirar completamente la suciedad acumulada.
Esta es una tarea ardua y hay que tener /strong>productos de limpieza industrial para poder realizarlo correctamente
Una de las tareas para una limpieza profunda de la cocina es la limpieza de la campana. En ella se acumulan restos de alimentos de salpicaduras, grasa, malos olores de humos, polvo… Además de una limpieza exterior, hay que limpiar las placas de forma habitual.
Los vapores que se desprenden en la cocina, sumado a salpicaduras y polvo acumulado, hacen que los armarios se vayan ensuciando rápidamente. En una limpieza profunda, además de limpiar las puertas y manetas de cajones y puertas abatibles, hay que limpiar los interiores. Para ello, es necesario sacar todos los productos y botes que haya en ellos, aspirarlos y después limpiarlos con una bayeta humedecida.
Aquellos pequeños electrodomésticos que usamos habitualmente, como el microondas, tostadora, batidora o robot de cocina, hay que limpiarlos en profundidad. Siempre hay que eliminar la suciedad cuando los aparatos están apagados y utilizar productos adecuados al tipo de material del que estén hechos.
Uno de los imprescindibles de una limpieza profunda de la cocina es la correcta limpieza y desinfección del frigorífico y congelador. La parte exterior se puede limpiar habitualmente para evitar que se acumule polvo y demás suciedad, pero su interior debe ser limpiado cada uno o dos meses.
Para ello, hay que sacar todos los productos, eliminar manchas, quitar migas y extraer las bandejas y accesorios del interior para lavarlos manualmente o en el lavavajillas.
Una vez al mes conviene hacer una limpieza en profundidad de los azulejos de la cocina, donde se va acumulando grasa, restos de alimentos y demás suciedad debido a salpicaduras y vapores que se generan en esta estancia.
Siempre hay que empezar por el techo e ir hacia abajo y retirar o tapar los muebles o electrodomésticos susceptibles de mancharse durante esta tarea.
Además de las paredes, hay que prestar atención al suelo de la cocina, ya que debido al uso que le damos, es uno de los que más se ensucian de la casa.
Al fregar diariamente arrastramos la suciedad hacia las juntas, las cuales debemos dejar blancas en una limpieza profesional de la cocina. No hay que olvidar tampoco la limpieza de los zócalos, previamente aspirándolos para quitar el polvo superficial.
Si cuentas con estantería y estantes en la cocina, también deben ser limpiados cada 15 días, aproximadamente. Retira los elementos que haya en ellos, aspíralos y, después, elimina las manchas y polvo acumulado con un producto adecuado a cada superficie.
Una de las tareas de limpieza olvidadas por muchos es la desinfección de cubos de basura de forma habitual. Cada vez estamos más concienciados sobre la necesidad de reciclar, pero eso también nos hace tener en nuestra casa una zona para ello.
Especialmente, los cubos destinados a los residuos orgánicos son los que más se ensucian y que hay que limpiar de forma más asidua.
Para aquellas cocinas en las que hay una despensa, también hay que dedicarle tiempo a su limpieza y organización. De forma mensual, hay que retirar los elementos del interior, hacer un aspirado general de cada balda y quitar suciedad de estantes y puertas de la despensa.
En una limpieza profunda de la cocina hay que comprobar el estado de los enchufes e interruptores, para quitar manchas y polvo acumulados y que estén en perfecto estado.
Tanto si la cocina cuenta con ventana o con puerta a la galería o con ambas, hay que dedicarles tiempo a limpiarlas en profundidad. Además de los marcos y cristales, también hay que quitar el polvo de las persianas y lavar con frecuencia las cortinas o estores de la cocina, ya que acumulan más suciedad que en otras estancias del hogar.
En cocinas grandes o cuadradas, se puede poner una zona office o una isla central en la que poder comer y reunirse en familia. Por eso, también resulta imprescindible hacer una limpieza profunda de todo el mobiliario, especialmente si las sillas cuentan con tapizado.
. Y otro de los elementos que no deben pasar por alto en una limpieza a fondo de la cocina es la eliminación de suciedad, y posiblemente grasa, de las lámparas o luminarias. Para ello, hay que quitar el polvo cuando estén apagadas utilizando el tipo de producto adecuado al material de ésta.
Cada zona de la cocina requiere una frecuencia de limpieza en relación con el uso que se le da. A diario es necesario limpiar las superficies, el fregadero, vitrocerámica u hornillos, así como barrer y fregar el suelo. Semanalmente hay que repasar el exterior de los electrodomésticos, placas de la campana e interior del microondas y horno.
Mensualmente se debe hacer una limpieza exhaustiva de armarios (por dentro y fuera), limpieza interior de nevera y repasar el estado del resto de elementos que hemos comentado en el check-list (enchufes, ventanas, azulejos, juntas…).
En cada cocina podemos encontrar diferentes materiales tanto en muebles, encimeras o incluso los electrodomésticos. Antes de llevar a cabo las tareas de limpieza hay que comprobar que se cuenta con los productos de limpieza aptos para ese tipo de superficies y que no se van a dañar al usarlos. Todos los paños y bayetas deben estar limpios y desinfectados y utilizar uno para cada tipo de suciedad (cal, grasa, suciedad superficial, etc).
Cuando se van a llevar varias tareas en la limpieza de la cocina, siempre hay que empezar por las zonas que estén más elevadas e ir bajando. Por ejemplo, en cuanto a la limpieza de armarios, hay que limpiar primero los muebles superiores.
También hay que comprobar si hay productos de limpieza que hay que dejarlos actuar un tiempo antes de eliminarlos, para poder empezar rociando aquellos que más tiempo necesiten.
Explícanos qué necesitarías y te daremos más información sobre cómo trabajamos, presupuesto y trabajos que puedes delegar en nuestro equipo profesional de limpieza.