La limpieza de los sanitarios es fundamental para la higiene de los que los utilizan. Los baños del hogar, los de la oficina o los sanitarios de uso público son los elementos que pueden concentrar una mayor de suciedad y son un caldo de cultivo para la proliferación de organismos perjudiciales para la salud. La concentración de humedad, el exceso de cal y un uso continuado y frecuente hacen que la limpieza sea especial. La limpieza es esencial en estas zonas.
Los pilares de la limpieza de sanitarios son:
Lo primero que hay que hacer es realizar una buena ventilación en los baños. La abertura de ventanas o aireación de la estancia evitará el exceso de humedad. La ventilación ayudará a disipar el mal olor concentrado y que se genera por el uso.
La mala ventilación es también responsable de la aparición del moho. Él es el responsable de esas antiestéticas manchas negras que se emplazan generalmente en las juntas de las superficies, de los aparatos sanitarios, azulejos y mamparas.
La acción de limpiar o lavar las distintas superficies con los productos adecuados y en el orden requerido es fundamental para acabar con la suciedad visible.
Limpiar con agua y jabón no implica, necesariamente, una desinfección de superficies. Los sanitarios requieren de una limpieza que garantice una desinfección de los aparatos y de los suelos de los baños. Para ello, se requiere de unos procedimientos y productos desinfectantes que acaben con los microorganismos nocivos para nuestra salud.
La limpieza de los sanitarios de oficinas, centros comerciales y locales públicos requiere de personal experto en este tipo de limpiezas, aunque normalmente lo hacen empresas de limpieza que se encargan de formar y cualificar a su personal, aquí os dejamos los pasos que hay que realizar las dejar los sanitarios limpios y desinfectados.